Nos adentramos en Petra por un estrecho pasillo o cañón de más de un kilómetro de largo, entre gigantescas montañas rojizas de ochenta metros de altura, llamado Siq que nos conduce a la ciudad excavada por los árabes nabateos en el siglo VI, antes de Cristo. Conocida como la octava maravilla del mundo antiguo, Petra es una fusión entre hombre y naturaleza; excavada, esculpida, con grandes dotes arquitectónicas y artísticas de un pueblo que la hicieron próspera integrándola dentro de las principales rutas comerciales, uniendo las rutas de la seda.
Dicen los visitantes, que nunca estás preparado para ver Petra, por mucha información e imágenes previas, porque la realidad es de un enorme impacto, donde la palabra incredulidad flota en tu mente.
Petra, se extiende entre el Mar Muerto y el Golfo de Aqaba, ciudad construída directamente sobre las grandiosas rocas de tonalidades sorprendentes, declarada Patrimonio de la Humanidad y todos sus alrededores protegidos, formando el Parque Nacional Arquelógico. Desde el año 2007, es parte de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo.
Petra es el gran tesoro de Jordania, el principal foco turístico que atrae a infinidad de viajeros y personas interesadas en historia antigua. Necesitaremos varios días para disfrutar de todo el misterio de este enclave.
En nuestro viaje por Jordania, planificaremos además, dentro de nuestra agenda, acercarnos a otro asombro de la naturaleza, el Mar Muerto, el lugar más bajo de la tierra, a más de cuatrocientos metros bajo el nivel del mar; su alta salinidad, impide el hundimiento debido a su elevada densidad. Aquí, podemos disfrutar de un baño en cualquier época del año, pues su entorno, siempre está a unos grados por encima del resto. Es muy rico en sales y minerales, desde la antigüedad, se ha venido utilizando para tratamientos medicinales y compuestos estéticos.
No podemos dejar de hacer una parada en Amman, capital de Jordania, una ciudad moderna con gente afable y acogedora. En ella, conviven una mayoría musulmana y un minoría cristiana. Ofrece muchos puntos de interés turístico como la antigua acrópolis griega o el teatro romano.
Jordania es un país seguro para el extranjero y muy hospitalario, solamente, debemos tener las precauciones de sentido común.
Necesitamos un pasaporte con seis meses de validez como mínimo y un visado por treinta días que en caso de llegar por vía aérea, podemos solicitar en el mismo aeropuerto internacional de Amman.
Será un VIAJE ESPECIAL…